Hogwarts es el colegio de magia y hechicería para magos, al que también asiste Harry. Está protegido con avanzados hechizos de seguridad para los magos y brujas que viven en él. El director del colegio es Albus Dumbledore, que, a pesar de su avanzada edad, es un gran mago que posee una sabiduría infinita. El colegio fue fundado por cuatro personajes que se tiene muy en cuenta: Hufflepuff, Ravenclaw, Slytherin y Gryffindor.
Escudo de las cuatro casas:
Los cuatro fundadores de Hogwarts dividieron el colegio en como en cuatro "equipos". Cada alumno que entraba en una casa era porque tenía características o cosas en común con el fundador de cada casa. Cuando uno entraba en Hufflepuff: era porque son
justos, leales y trabajadores. Los Hufflepuff son buenas personas y suelen caer bien a todo el mundo. Son pacientes, tolerantes y siempre harán todo de forma honrada, sin hacer trampas y respetando las reglas.
Cuando uno entraba en Ravenclaw: era porque tienen inteligencia, curiosidad y sabiduría, una mente dispuesta, individualismo y creatividad.
Cuando entraba en entraba en Slytherin: era porque
tienen inteligencia, astucia, ambición, ingenio,
determinación, y "un cierto desprecio por las reglas".
Tienden a dudar antes de actuar, con el fin de sopesar
todos los posibles resultados antes de decidir exactamente
lo que se debe hacer.
Cuando uno entraba en Gryffindor: era porque tienen
coraje, valor y honor. Un buen miembro de Gryffindor tiene
gran osadía, temple y caballerosidad. Son capaces de todo
por defender en lo que creen y nunca se dan por vencidos.
También son capaces de romper las reglas si es necesario y
les encantan los retos, cuanto más difíciles, mejor. Se
atreven a lo que la mayoría no se atreve, y generalmente
salen bien cuando se enfrentan a un problema. En cada
obstáculo ven una oportunidad para demostrar quienes son
realmente.
Cada alumno de Hogwarts es asignado a cada casa por el
sombrero seleccionador, un sombrero parlante.